Bajo una serie de entrevistas acerca de una problemática que todos enfrentamos, dejamos la tercera parte basada en el universo de la danza y lo que podemos hacer en él. En este sentido Cele Herrera López, la profesora y directora del Instituto «Bailarinas del Rocío» nos dió sus recomendaciones. «El arte sana…Bailar nos hace más felices», aseveró. El aislamiento, sentimiento de soledad, de culpa, irritabilidad, preocupación son algunos de los efectos secundarios que los tiempos de COVID 19 nos dejó. Así como conflictos familiares, y hasta violencia doméstica en algunos casos. «No nos permitimos estar presente, vivir aquí y ahora«, exclamó al respecto.

Desde Ahora San Juan entrevistamos a tres destacados de nuestra provincia dedicados a la buena vida: Arrancamos el domingo con Emanuel Lucero en lo deportivo, ayer en la segunda parte se sumó Gabriela Sillero en el arte visual, y para finalizar hoy Celeste Herrera López nos comentó sobre los beneficios de la danza.Todos ellos despliegan un abanico de actividades para realizar y apaciguar el estrés, la ansiedad o la depresión que nos provoca el trajín diario.

Ya sea debido a los cambios vividos en la pandemia o por las diferentes situaciones que nos atraviesan. El desgaste mental en las personas, según la OMS (Organización Mundial de la Salud) provoca otras enfermedades sobre las que no tenemos mayores controles y que tienden a empeorar cada día. “Tanto la ansiedad como la depresión paralizan al individuo y son consideradas enfermedades que restan calidad de vida“, manifiesta.
A continuación, daremos cierre al tema con la última parte realizada para quienes prefieren bailar:

Celeste Herrera López, profesora y directora, junto a su hermana Verónica, del instituto Bailarinas del Rocío, en Pocito. Recibida como profesora de danzas españolas e instructora en Bollywood Dance, en danzas árabes. Y experta en todo tipo de ritmos (clásicos, contemporáneo, jazz, latinos, tango, malambo femenino, folclore, etc.), quien hace un mes compitió en Córdoba en el precosquín 2022 representando a la Sede San Juan. Advirtió: «Ser multidanza me da la posibilidad de ser versátil a la hora de aprender. Y recomiendo a todos implementarlo, cualquiera sea la danza elegida. Debemos abandonar esa creencia errónea de que bailar es para niños«.

«El arte sana«: Así lo afirmó Celeste cuando comentó que bailar nos hace sentir más felices. «Nada más saludable que mover el cuerpo, mantener la mente activa, aprendiendo cosas nuevas, descubriendo un mundo infinito de posibilidades y el alma se llena cuando escuchamos los aplausos del público«, expresó. Nos contó su experiencia propia al respecto: «Cuando entro a mis clases de danzas, por un momento dejo de lado mis pensamientos, mis problemas y, solo bailo. Cuando termino, nada vuelve a ser como antes, la actitud para afrontar mis días es otra, una mejor y más positiva«.

–¿Por qué pensas que vivimos estresados?, le cuestionamos a esta maestra del arte de bailar.
-«No nos permitimos estar presente, vivir el aquí y ahora, disfrutar de una charla, ver una serie, estudiar. Porque nuestra cabeza piensa en después, mañana, todo lo que hay que hacer, todas las cosas que tenemos que pagar, cuántas horas nos queda por dormir antes de despertar de nuevo, entre otras cosas. Pensamos tanto en todo lo que se viene que automáticamente entramos en un estado de ansiedad de querer hacerlo todo, pero no estar haciendo nada a la vez y nos estresamos», respondió.

El remedio para la enfermedad: Celeste especificó que bailar es una buena medicina: «Cuando lo hacemos, la mente se empieza a focalizar en el entorno, en los sonidos, en la manera en la que nos movemos, y eso ayuda a sentirnos bien con nosotros mismos. Si estuviéramos frente a un espejo, veríamos lo felices que nos ponemos. Sonreiríamos y los problemas pasarían a un segundo plano. La ansiedad y el estrés desaparecerían, porque lo importante es estar presente y vivirlo».
Beneficios al bailar:
- Mejoramos la postura.
- Obtenemos una mejor actitud, dejando la timidez.
- Nos desahogamos, reímos mucho más.
- Nos sentimos más lindos con nuestro cuerpo, más sexys, seguros de nosotros mismos.
“Si pudiera contarte lo que se siente, entonces no valdría la pena bailar”, dijo Cele.

Lo bueno de ser profe de danza:
- Nos ayuda a trabajar en distintas instituciones.
- Podemos fundar nuestra escuela de danza y ser nuestro propio jefe. Para así educar a futuros profesionales.
- Ser un bailarín y/o coreógrafo en teatros importantes en el mundo.
- Hacer videoclips de famosos, o participar en espectáculos importantes.
- Conocer nuevos lugares en las competencias.
«El arte no tiene un techo, el conocimiento y la creación es infinita«, comentó Herrera López al respecto. A lo que agregó que la danza no distingue sexo, edad, patrimonio, color de piel o religión.
Cómo reconocer el ritmo adecuado: Celeste recomienda investigar en las redes sociales los institutos más próximos para comenzar a experimentar diferentes opciones e informarnos. Otro consejo útil es probar varias clases. Es decir, en varias instituciones, como por ejemplo la de ella, ofrecen clases gratuitas experimentales. «Ver bailar no es igual que hacerlo uno mismo, podemos cambiar de opinión ya sea por el ambiente, los compañeros, la forma de explicar del profesor, nuestras ganas de aprender, etcétera», detalló.

Tips de relajación: Escuchar música, permitiéndonos dejar volar la imaginación y disfrutar, es uno de los que nos mencionó. «Otra técnica, que uso en mis clases y en la vida cotidiana, es la respiración. Ser consciente de la respiración es muy importante, nuestra mente manda el mensaje al cuerpo de que es momento de relajar y aflojar. Aprender a respirar me ayudó a no quedarme sin aire en plena presentación en el escenario. Y además a conciliar el sueño en noches de insomnios y a calmar la ansiedad en momento de nerviosismo», describió Celeste.
Cómo se hace: Buscamos un lugar cómodo, en lo posible lejos de ruidos y cerramos los ojos. A continuación, empezamos inhalando por la nariz. Llenamos los pulmones de aire, retenemos unos segundos ese aire y lo exhalamos al máximo por la boca. «Recuerden ser conscientes de la respiración y sentir como el cuerpo se relaja, concéntrense en su respirar hasta que la ansiedad se haya ido o se queden dormidos«, aconsejó.
¿En la casa o en la academia? Según las palabras de esta especialista, es mejor hacerlo en un instituto o academia, junto con el profesor o profesora que los guiará en sus movimientos y los corregirá. Además, junto a sus compañeros la clase será más dinámica y entretenida.
Y concluyó con la frase: «El mejor regalo que podemos hacernos es escucharnos y mimarnos. Obsequiarnos momentos personales, no dejar de vivir experiencias por el miedo al que dirán«.

En conclusión, para todo malestar mental y/o emocional, ayuda: Hacer ejercicio físico, con cambios en la dieta. Identificar actividades que nos hacen bien, como por ejemplo pintar, dibujar o bailar. Y siempre recordar de disfrutar el hoy, con la fe puesta en que todo lo que nos propongamos lo podemos realizar si nos organizamos.