Al fin la telenovela llamada PASO (elecciones de candidatos obligatorias) tiene estreno el 12 de Setiembre, y con ella el chiche con que jugarán todos los aspirantes a un cargo de algo. La definitiva será el 14/11. Para este año serán solo 3 diputados en San Juan, pocos carguitos, aunque muchos lo verán como trampolín para el 23. Muchos se van a olvidar por completo de la pandemia, la crisis y abrirán el baúl de promesas para ver si agarran algo o ganan espacio. Desde El Pasillo nos reunimos con un funcionario de segunda línea alineado con el kirchnerismo que prefirió el anonimato para preservar “a los compañeros”.
-¿Qué cree que va a pasar en pandemia y las PASO?
“El covid ya es una herramienta más de campaña, de uno y otro lado. Lo que sí, van surgiendo todas las malezas que estaban ocultas en el sembradío de la politiquería barata. Digo maleza, porque son los que hacen daño a la política, los que en nombre de ella bastardean ideales para que solamente los voten. Les importa un carajo la ideología, hoy se visten de peronistas, mañanas del pro, andan con pañuelo verde y luego celeste. Es el egoísmo extremo en busca de negocios y la mezquindad que está impuesta como sistema. Esta maleza es producto de algo deliberadamente hecho: promover la degradación de la política para que el pueblo no cuente con la herramienta que hace posible los cambios. ¿Si la política y los políticos son mala palabra, quien dirige el Estado y los destinos de la población?. Ahí aparece la meritocracia con su cuota de desprecio social, de clase, el odio liso y llano por el otro y por el pobre especialmente. Aparecen los que martillan con la idea de que todo lo que tenga olor popular es malo y que “los que saben”, que curiosamente son los que más roban del Estado como Macri, deben manejar “la cosa”. Eso no es democracia, es oligarquía, es aristocracia y desprecio por el pueblo.”
-¿Por qué no se desprende la política de estas “malezas”, como usted dice?
“Las malezas son lo más difícil de erradicar de cualquier siembra, por eso me parece válida la analogía. Lo importante es la siembra y terminamos hablando de la maleza. ¿Se entiende?. La cuestión es que no hay intención de erradicar este fenómeno, porque son parte del sistema político, son producto de un intercambio, de la mercantilización del accionar político. Hay dos tipos de malezas, para usar la analogía, la “maleza de abajo” que ofrece movimiento, gente, suma en la base, actos, territorio y a cambio quieren “algo”: puesto, dinero, planes o lo que sea. Y está “la maleza de arriba” que terceriza la militancia. A los de abajo les llega un espejito de colores que será usado para pelear por la búsqueda de su conchabo. Para que no haya maleza debería haber política, militancia partidaria real y partidos funcionando, eso no existe porque los que están arriba solo quieren cerrar el boliche y quedarse con todo, y los de la maleza de abajo quieren que siga igual porque si se abre la cosa pierden sus curros. Pasa en todos los partidos que tienen presencia en el poder”.
-¿Y si es tan pesimista con respecto al sistema político y no acuerda por qué sigue en política y ocupa un puesto?
“Porque uno no se puede rendir graciosamente, entregar las banderas y no pelear. La batalla se da desde dentro y desde fuera, para cambiar la realidad necesitamos militancia, gente formada y espacios de poder. Decir lo contrario es hablar de cuentos de hadas.”
Ya en doble “off the record” comentó que serán muy difíciles estas elecciones, que la cosa no está para nada sencilla para el oficialismo tanto a nivel local como nacional. La incertidumbre reina y con ella saca provecho la oposición, si se aplana la curva, se vacuna y se ve mejoras en la economía, aunque sean pocas, se la puede pelear y ganar cree. Igualmente considera que a pesar de todas las dificultades el Frente de Todos ganará, no tanto acá por los candidatos que no considera sean buenos, sino “anclas”, sino por la imagen general del accionar de gobierno. «Encima que la cosa está complicada, aparecen cada ancla de candidato, son menos diez… seguro para que el Sergio brille solo (sonríe)”.
Nos vemos en el próximo El Pasillo.