El concepto de egoísmo sabio muestra que la línea entre el interés propio y el interés de los demás es porosa. Adam Grant, un psicólogo organizacional de la Escuela Wharton de la Universidad de Pensilvania, tiene un término adecuado para la combinación de desinteresado y egoísta: otro.
La investigación psicológica moderna apoya la idea del Dalai Lama. En su libro, “Dar y recibir”, el Sr. Grant escribe que, en un contexto profesional, las personas que son generosas con su tiempo pero que también tienen en cuenta sus propios intereses suelen ser las personas más exitosas en una organización. Esto se debe en parte a que la generosidad te hace más querido por tus compañeros de trabajo y en parte porque te hace más feliz y con más energía. Es una espiral virtuosa: ser amable con los demás te hace más feliz, lo que te hace más amable, lo que te hace aún más feliz.
Prueba la meditación de bondad amorosa
Siéntate en silencio, cierra los ojos y recuerda una sucesión de personas. Comience con alguien que sea fácil de amar, como una mascota o un niño. Tan pronto como tengas una imagen mental de esa persona, envía en silencio cuatro pensamientos amables: Que seas feliz; que estés a salvo; que seas saludable; que vivas con tranquilidad. Luego pasa a ti mismo, un mentor, una persona neutral, una persona difícil y luego todos los seres en todas partes. La investigación sobre esta práctica aún está surgiendo, pero los estudios han demostrado que la meditación de bondad amorosa puede aumentar los sentimientos de conexión social y disminuir la depresión. Este es el clásico egoísmo sabio: cultivas la capacidad de cuidar y te vuelves más saludable y feliz en el proceso. Le sugiero que comience poco a poco, partiendo de uno a cinco minutos algunos días a la semana, y luego desarrolle a partir de ahí.
Al principio me resistí a este tipo de meditación porque, además de egoísta, también soy escéptico y anti sentimentalista. Pero una vez que lo incorporé a mi práctica, me ayudó a relajarme. La calidez y la compasión son omnidireccionales. No puedes dejarte a ti mismo de lado.
Con el tiempo, a medida que practiqué enviarme bondad amorosa a mí mismo, me di cuenta de que mi egoísmo estaba motivado por el miedo. En los viejos tiempos, solía volver al egoísmo cada vez que, por ejemplo, me desconectaba de una conversación porque estaba comprobando compulsivamente dónde se encontraba mi programa en el ranking de podcasts. Ahora, a veces puedo ver este tipo de egoísmo reflexivo como un impulso natural, aunque poco hábil. Es el organismo tratando de protegerse a sí mismo, pero no tengo que obedecerlo automáticamente. Tener una actitud más amistosa conmigo mismo, a su vez, me ha ayudado a juzgar menos a otras personas, lo que ha mejorado mis relaciones y por ende, me hace más feliz.
Habla con otras personas
Concéntrese en aumentar la cantidad de interacciones positivas que tiene a lo largo del día, incluso con extraños en cafeterías y ascensores. Los estudios han demostrado que estos “micromomentos” son un poderoso impulsor de la felicidad. Esta práctica es un potente correctivo a la falta de conexión social que muchos de nosotros experimentamos.
Incluso antes de la pandemia de coronavirus, la soledad iba en aumento. Sabemos por la investigación psicológica que la fuerza de nuestras relaciones es quizás la variable más importante cuando se trata del florecimiento humano.
Dedica tus tareas diarias a otras personas
Antes de comenzar cualquier actividad, tómate un segundo para dedicar lo que estés a punto de hacer en beneficio de todos los seres. En serio. Antes de cepillarse los dientes, tomar una siesta o comer un sándwich, dígase a sí mismo en silencio algo como: Estoy haciendo esto para poder ser fuerte y saludable, no solo para mí, sino para poder ayudar a otras personas. Al igual que con la meditación de bondad amorosa, encontré esto un poco meloso al principio, pero ahora lo veo como una forma útil de elevar mis actividades cotidianas y activar mi altruismo latente. Entonces, antes de hacer ejercicio o meditar, trato de recordarme a mí mismo que lo hago no solo por razones egoístas, sino también para poder ser un padre, esposo y compañero de trabajo más saludable, más feliz y más útil.Crucialmente, está bien comenzar esta y todas las demás prácticas que he enumerado aquí, con una intención egoísta. Es probable que su motivación comience a cambiar con el tiempo.
Aprovecha las pequeñas oportunidades para ser generoso
La ciencia nos dice que ser generoso beneficia tanto al que lo recibe como al que lo da. Los escáneres FMRI muestran que ser generoso activa las mismas partes del cerebro que comer un rico postre. Se llama el «alto del ayudante». Y el gesto no tiene que ser grandioso. No tienes que precipitarte en un edificio en llamas. Puede ser tan simple como mantener la puerta abierta para alguien, hacer un cumplido o enviar un mensaje de texto a alguien que está pasando por un momento difícil.
El cambio puede ser un proceso lento. Nuestro condicionamiento hacia el individualismo y el materialismo es profundo, por lo que fue útil para mí sentarme con el Dalai Lama y recordar el sabio egoísmo. He estado trabajando en estas habilidades durante años, y todavía me olvido y caigo en el acaparamiento y luego en rondas posteriores de autocrítica. Pero con el tiempo, he aprendido a girar el dial hacia el altruismo.
Un ejemplo es este artículo que estás leyendo. Claro, una parte de mí está motivada por el deseo de promocionar mi trabajo y que mi madre me vea en The New York Times. Pero otra parte de mí está motivada para compartir esta información porque sé por investigación y experiencia personal que es probable que mejore su vida. He llegado a ver que no hay nada de malo en obtener placer de la gratificación egoísta, especialmente cuando alimenta el trabajo orientado a los demás. ¿Por qué el egoísmo y el desinterés no pueden existir en una doble hélice beneficiosa?
La perfección no está en oferta. Algunos días, su brazo Avalokiteshvara puede tener bursitis. En lugar de medirnos con el Dalai Lama, podemos usarlo como una estrella polar útil, un recordatorio de que todos podemos entrenar nuestras mentes para dar pasos marginales pero significativos. Incluso las personas como yo que temen tener un corazón irremediablemente oscuro o tal vez, personas como tú.
La versión de un posible vínculo sentimental entre la humorista y el actor gana fuerza. La madre de Fede no esquivó el tema y dio su opinión al aire en su programa.
El mundo del espectáculo argentino vuelve a encenderse con una noticia que nadie esperaba: Fátima Florez y Fede Bal estarían viviendo un romance en secreto. Según trascendió en las últimas horas, ambos habrían compartido varios encuentros en Miami y Buenos Aires, generando especulaciones sobre una conexión que hasta ahora se desconocía.
El escándalo explotó en Puro Show, cuando el periodista Matías Vázquez reveló detalles comprometedores sobre la relación. “Cenaron juntos en Miami, fueron a bailar y pasaron la noche juntos. Hubo reencuentros en Buenos Aires, incluso en el departamento de ella. Los vecinos se quejaron del ruido”, aseguró, citando fuentes cercanas.
Vázquez también sostuvo que la primera chispa surgió en noviembre, durante el Martín Fierro Latino, y que en los últimos días la historia habría sumado nuevos capítulos. “Hubo revancha en Buenos Aires y otra vez se escucharon gemidos. Pasó la noche y se lo vio salir de la casa de Coronel Díaz”, agregó, dejando a todos los panelistas en shock.
El primer encuentro entre Fátima y Fede habría tenido lugar en un exclusivo restaurante de pastas en Miami, donde compartieron mesa con Carmen Barbieri y Marcelo Polino. “La atracción era notoria. Se mandaron mensajes durante semanas. Todo muy caliente”, indicaron testigos de la reunión.
Carmen Barbieri, madre del actor, no tardó en referirse a los rumores. En Mañanísima, su programa matutino, aseguró que no tenía conocimiento del supuesto romance, pero dejó en claro que no se opondría. “Me entero por ustedes, pero apruebo la relación de Fede con Fátima”, declaró con total sinceridad.
La conductora también recordó que, durante la gala en Miami, Fátima le pidió permiso para ir a la post fiesta con su hijo. “Le dije que sí, que vaya con Fede, que tenía auto. Ella es la ex del Presidente y él es el ex de tantas”, bromeó, desatando risas en el estudio. Sin embargo, destacó que su hijo nunca le mencionó nada al respecto. “Fede está en Londres, me contó que fue a ver Cabaret, pero de esto, nada. Igual, hacen una pareja hermosa”, agregó.
Lejos de quedarse con la duda, Carmen decidió escribirle a su hijo en vivo y, al no obtener respuesta, le envió un audio en pleno programa: “Me dicen que estás saliendo con Fátima, yo no sabía nada. Si es cierto, ojalá estén bien, pero todo el mundo lo comenta. ¿Es verdad?”. Para cerrar con su característico humor, le pidió una primicia: “Fede, mandame un audio así te escuchamos, estoy cerrando el programa”.
Santiago Caputo y Facundo Manes protagonizaron un escandaloso cruce tras el discurso del presidente Javier Mile en la apertura anual del Congreso.
¿Qué pasó entre Javier Milei y Facundo Manes?
En medio de su discurso en el Congreso, donde hablaba de la aceleración de los nombramientos en los cargos vacantes del Poder Judicial, el presidente Javier Milei tuvo un intenso enfrentamiento con el diputado radical Facundo Manes, quien se mostró en contra levantando la Constitución Nacional.
«Leela Manes te va a hacer bien, supuestamente vos entendés cómo funciona el cerebro y no aprendiste nada. Leéla bien. Quizás tu versión es con IA y cambia de libertaria a kirchnerista como hiciste vos, Manes», le respondió el jefe de Estado.
¿Qué pasó entre Santiago Caputo y Facundo Manes?
Luego de eso, Manes dejó su banca en medio de gritos de los militantes mientras le mostró el ejemplar de la Constitución a Santiago Caputo. Rápidamente, el asesor estrella de Milei lo increpó cerca de una escalera del Congreso.
Video: Data Clave
Posteriormente, el radical afirmó que un hombre que acompañaba a Caputo lo golpeó en el pecho. Junto al asesor presidencial, estaba el youtuber libertario Fran Fijap, quien en ese momento atinó a empujar la cámara que grababa el episodio. “Vino enfurecido y me dijo: ´Ahora me vas a escuchar, me vas a conocer´. Y alguien que estaba con él me pegó dos piñas», contó Manes, a la salida del Congreso ante las cámaras de los medios.
Horas después, en su perfil de X (ex Twitter), el mandatario compartió un video que une la acusación de Manes y la palmada que Caputo tras su discusión, y afirmó: “Aquí la prueba de lo mentiroso que es Manes y de la basura que son los periodistas que intentaron hacer de esto un escándalo».
Además, Milei lanzó que “muchos periodistas son parte del problema. Coimeros”.
El programa radial «Hola Chiche» fue el escenario de una tremenda discusión entre el conductor y su compañera Matilde Badini, quien al final de la emisión terminó renunciando «después del destrato de esta tarde», dijo.
Momentos de suma tensión se vivieron entre el conductor del programa radial “Hola Chiche” y una de sus panelistas, que terminó renunciando en vivo por el “destrato” que sufrió por parte del experimentado periodista y conductor.
Acompañado por Matilde Badini, Analía Graffigna y Diego Colombres, Chiche Gelblung encabeza en Radio del Plata un programa periodístico que lleva su nombre, y la discusión comenzó en la emisión del viernes último por un tema vinculado a la salud mental.
Según la óptica de Chiche, dos años serían suficiente tiempo para un tratamiento, mientras que Badini respondió que en “dos años de tratamiento con un psicoanalista no hacés nada, flaco”.
“Bueno, está bien, vos sos psicoanalista”, le retrucó el conductor, a lo que su compañera dijo con bastante molestia que “no soy psicoanalista, soy paciente”.
Lejos de apaciguar los ánimos y el tono del cruce, ambos fueron subiendo el nivel de belicosidad hasta que Chiche la cuestionó: “¿Será posible que todo quieras saber, vos? ¡No podés saber de todo!” Y Badini no se quedó atrás, elevando el enfrentamiento verbal: “No me gusta escucharpelotudeces”.
Matilde Badini
En ese momento, Gelblung la conminó a retirarse del estudio de radio: “Bueno, entonces retírate, si no te gusta. Te podés retirar. Retirate si no querés escuchar pelotudeces”, insistió el conductor radial.
Cuando Badini intentó bajar los ánimos, Chiche no dio marcha atrás sino que elevó el tono: “Vos tenés cosas más geniales, decilas. No ofendas al pedo, insolente. Respeto, por lo menos, a la jerarquía. Sos una insolente,no me gusta la gente insolente”, disparó ante el silencio incómodo del resto del personal del programa.
Finalmente, el periodista y conductor saludó a la audiencia hasta la semana próxima, pero Matilde Badini dio las ultimas palabras del programa ante el silencio de Chiche: “Para todos los oyentes, les agradezco el tiempo que estuve aquí. Yo soy una agregada sin experiencia, no soy periodista, que trate de agregar cosas chiquitas, pero desde el corazón”.
“No puedo volver después del destrato de esta tarde. Me siento despedida. Los quiero muchísimo y pase muy lindas tardes con todos ustedes, gracias por escucharme”, concluyó Matilde Badini entre lágrimas.