La Organización Meteorológica Mundial (OMM) validó dos nuevos récords mundiales relacionados con rayos que se produjeron en América, entre ellos, uno que se desplegó sobre Argentina.
Se trata de un “megarrayo” que se extendió sobre Uruguay y el norte del país en 2020. El fenómeno natural que duró 17,1 segundos y que batió la marca de duración, según los registros de la OMM, recorrió varios kilómetros: su extensión fue desde el norte de la provincia de Entre Ríos hasta la Bahía de Samborombón, en la provincia de Buenos Aires, pasando por el territorio vecino.
El megarrayo certificado como de mayor duración produjo su descarga de forma continuada durante 17,102 segundos (+- 0,002 segundos) en el marco de una tormenta que se formó sobre Uruguay y el norte de Argentina el 18 de junio de 2020.
El anterior récord de mayor duración de un megarrayo se había observado en el norte de Argentina el 4 de marzo de 2019, cuando su descarga se produjo de forma continuada durante 16,73 segundos entre Córdoba y Santa Fe. Se trataba de un valor de 0,37 segundos más breve que el nuevo récord.
La medición se realizó a través de los satélites con sensores especiales que proporcionan una cobertura casi mundial de la actividad total de rayos, tanto de las descargas en las nubes como de los rayos de nube a tierra.
«En la actualidad, disponemos de excelentes mediciones de sus múltiples facetas, y ello nos permite descubrir nuevos y sorprendentes aspectos de su comportamiento. Ahora que contamos con un registro sólido de esos rayos monstruosos, podemos empezar a entender cómo se producen y estimar los desmesurados efectos que tienen. Hay muchas cosas que todavía no sabemos acerca de estos monstruos», afirmó el autor principal y miembro del comité de evaluación, Michael J Peterson, del Grupo de Espacio y Teledetección (ISR-2) del Laboratorio Nacional de Los Álamos.
En tanto, el Secretario General de la OMM, el profesor Petteri Taalas, explicó que esto es un «gran peligro» que se cobra numerosas vidas cada año. «Estos récords ponen de relieve cuestiones de importancia para la seguridad pública respecto de las nubes electrificadas en las que los rayos pueden recorrer distancias enormes«, explicó .
El Comité de la OMM encargado de los fenómenos meteorológicos y climáticos extremos lleva un registro oficial de estos a escala regional, hemisférica y mundial reconoció estos récord.
Los dos nuevos récords se establecieron en zonas conocidas por estos fenómenos en América del Norte y del Sur, a saber, las Grandes Llanuras en América del Norte y la Cuenca del Plata en América del Sur.
Los nuevos récords validados por la OMM, que mantiene el registro oficial de fenómenos extremos a nivel mundial, hemisférico y regional, se publicaron en el Bulletin of the American Meteorological Society.
«Las mediciones de fenómenos medioambientales extremos son una prueba viviente de toda la fuerza de la naturaleza, así como de los avances científicos que ahora nos permiten realizar esas evaluaciones. Es probable que existan fenómenos extremos aún mayores y que podamos observarlos a medida que evolucione la tecnología de detección de rayos», dijo el ponente de la OMM sobre registros mundiales de fenómenos meteorológicos y climáticos extremos, Randall Cerveny.
El peligro de los rayos y cómo protegerse.
«Estas descargas extremadamente extensas y de larga duración no fueron episodios aislados, sino que se produjeron en el marco de tormentas activas. Cada vez que se oyen truenos, es momento de buscar un lugar seguro para protegerse de los rayos», señaló el especialista en rayos y miembro de dicho comité Ron Holle.
Holle recordó que los únicos lugares donde los rayos no constituyen una amenaza son los edificios de envergadura que cuentan con redes de cableado y de tuberías, no estructuras como las instaladas en la playa ni tampoco las paradas de autobús.
Añadió que otro de los lugares considerados seguros es el interior de los vehículos con techo metálico completamente cerrado, no los buggies ni las motocicletas.
«Los rayos son un peligro importante y muchas personas mueren cada año. Estos nuevos registros ponen de manifiesto la grave preocupación por la seguridad pública asociada a las nubes electrificadas que producen rayos que pueden recorrer distancias considerables», afirmó el secretario general de la OMM, Petteri Taalas, según la agencia AFP.