La caza y el uso de sus cuernos para medicina tradicional asiática ha generado una drástica caída en el número de individuos en su hábitat natural.
Los rinocerontes son unos grandes mamíferos que se destacan por tener su hocico cornudo y que desde tiempo inmemorial captan la atención por su aspecto extraño y con claras reminiscencias prehistóricas. La palabra rinoceronte proviene del griego rhinós (nariz) y cerós (cuerno). En su hábitat natural, pueden vivir 45 años, pero en cautiverio pueden alcanzar los 50 años o más. Sus cuernos se utilizan por sus propiedades curativas, y es por esto que están en peligro.

Por qué son tan buscados sus cuernos:
Porque tienen queratina, componente del cabello humano y uñas. Son de pelos pegoteados y se suelen vender como trofeos o decoraciones, aunque en China se emplean principalmente para la medicina al moler los cuernos y agregar ese polvo a los alimentos. Con la creencia de que cura algunos trastornos como el reumatismo o tiene propiedades afrodisíacas.
Un poquito sobre ellos:
Existen cinco especies de estos grandes animales, algunos tienen dos cuernos, mientras que otros tienen sólo uno. Hay especies africanas (el negro y el blanco) y asiáticas (el indio, el de Sumatra y el de Java). Todas ellas con el sentido de la vista poco desarrollado, y un excelente olfato y oído.
Son animales solitarios y muy territoriales, especialmente cuando se trata de proteger a sus crías, a pesar de ello, son pacíficos y tranquilos ya que no suelen atacar salvo que se vean amenazados.

Las hembras tienen un embarazo largo, con una gestación de 15 a 16 meses. Además, los bebés pesan entre 40 y 60 kilogramos al nacer. Son hervíboros (comen plantas). Algunos se alimentan de árboles o arbustos y otros hierbas.

Disfrutan dándose baños de barro para refrescarse y también para protegerse de los insectos y del sol.
Amigos peculiares: Se relacionan con los pájaros: El picabuey, un ave pequeña con la que comparte el hábitat, se sienta en el lomo del rinoceronte y se come los insectos que se encuentran en su piel. Además, cuando acecha algo extraño, el pájaro grita y advierte al rinoceronte. Así entablan una sociedad perfecta.


Números que alarman:
Se estima que sólo quedan 29.000 en estado salvaje, debido a la caza furtiva y la pérdida de su hábitat.

/ Citado de un estudio del Prof. Dr. Juan Enrique Romero @drromerook es médico veterinario. Especialista en Educación Universitaria. Magister en Psicoinmunoneuroendocrinología. Ex Director del Hospital Escuela de Animales Pequeños (UNLPam). Docente Universitario en varias universidades argentinas. Disertante internacional.