En medio de la definición de la sanción del senador Edgardo Kueider, detenido en Paraguay por contrabando, Miguel Ángel Pichetto sostuvo que el escenario de expulsión es probable, aunque sería “gravoso para el Gobierno” porque el senador “venía orbitando en el escenario de La Libertad Avanza”. Además, el diputado analizó el primer año de gestión de Javier Milei y criticó la decisión del Gobierno de no debatir la ley de Presupuesto. “¿Por qué los derechos de los gobernadores no se pueden plasmar en el marco de la ley presupuestaria?”, se preguntó en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio JAI (FM 96.3).
Miguel Ángel Pichetto es diputado nacional por la provincia de Buenos Aires y presidente de Encuentro Republicano. Anteriormente, fue titular de la Auditoría General de la Nación, candidato a vicepresidente junto a Mauricio Macri y presidente de bloque en ambas Cámaras del Congreso.
¿Qué significa en el Gobierno y en la sociedad el primer año de Milei como presidente? ¿Cuáles son las posibilidades de un futuro igual o distinto?
Esto no les gusta a los autoritarios
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Este año ha sido un año intenso. Creo que está signado por una mayor fragilidad institucional, por el estilo del Gobierno y por un componente de presión sobre el sector del poder Legislativo y otros poderes del Estado. El fundamento es la reafirmación de la autoridad presidencial de un presidente que nace débil por poco nivel de representación en el Congreso, como consecuencia del sistema electoral argentino del balotaje. Pero podemos decir que ha logrado un objetivo importante, que ha sido la baja de la inflación y no se puede desconocer. Empezó con un gran riesgo de hiperinflación y llega a fin de año con una tasa de inflación parecida a la tasa del dólar, cerca del dos por ciento. Eso hay que inscribirlo dentro de los resultados positivos del gobierno y hay que destacarlo.
También lo ha hecho en el marco de un ajuste fiscal muy duro, en donde los principales destinatarios de este ajuste fueron el sector de jubilados y las provincias. Todos los fondos de transferencia a las provincias fueron recortados, especialmente los impuestos que las provincias deberían recibir de manera coparticipable, que están establecidos en la ley, como Bienes Personales, combustibles, IVA, monotributo o el financiamiento educativo. Hubo un recorte muy fuerte sobre estos fondos que se destinaban a las provincias.
Esto es lo que demandaban las provincias en el marco del debate de la ley de Presupuesto: una reconstrucción o una reconfiguración de los aportes coparticipables frente a impuestos como el combustible, donde tienen asignaciones específicas para hacer caminos o para fomentar subsidios al transporte, y el Gobierno no lo hace pero se queda con el recurso. Creo que este es uno de los temas quizás más complejos. Al final del año no va a haber Presupuesto, y el gobierno ha decidido gobernar la etapa que viene sin Presupuesto, con mayor discrecionalidad y con cepo, que es otra de las cuestiones también centrales de la política económica.
También se puede mencionar que hay áreas que han crecido en la economía. Ha crecido la inversión en el agro y la minería, que son dos sectores que tienen una dinámica interesante y ahí está el RIGI. Todavía no han venido inversiones importantes, pero eso se ha ido moviendo también con inversores locales del petróleo, el gas y la minería. Al mismo tiempo, ha perdido fuertemente la industria y el comercio, que son actividades que están centralizadas y se mueven en pesos: reciben salarios en pesos y consumen en pesos.
El desafío del Gobierno en este cuadro es ver cómo se reactiva la economía, atento a que el dólar no se va a modificar. La visión del gobierno es mantener el crawling peg del 2% y no devaluar. El crecimiento vendría, o supuestamente vendría, por aumento de la productividad o por baja de impuestos. La crisis está centrada en la industria, el comercio, la construcción y este es el balance, con bastante prudencia en términos del uso de las palabras.
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Me parece que hay interrogantes con relación a Estados Unidos. El alineamiento con Estados Unidos le puede acercar una mejora en la relación con el Fondo, especialmente con Trump, al que apostó fuertemente de entrada, y este también es un mérito de su política exterior personal. El presidente tiene una política exterior errática, pero en el marco de la relación con Estados Unidos y con el futuro presidente, jugó anticipadamente y acertó. Ahora bien, Trump viene con una política proteccionista que va a acentuar después de su primer periodo. Viene con aranceles y hay que ver cómo sostiene la tasa de interés. Si la tasa de interés aumenta, eso va a tener repercusiones negativas; si sigue a la baja, puede beneficiarnos. Esos son los grandes interrogantes. El mercado americano siempre ha sido muy restrictivo en la producción primaria, y creo que la política de Trump se va a acentuar. Al mismo tiempo, los organismos multilaterales y el Fondo son actores que pueden generarle un apoyo al gobierno. Hay que ver qué es lo que hace en ese plano el presidente Trump, que puede configurarse como aliado.
He escuchado muchas veces la frase «Los rusos también juegan». El Gobierno también está hecho por la oposición. ¿Cómo ves la posibilidad de que se pueda construir desde el peronismo una oposición alternativa? ¿Cuánto puede aportar o restar Cristina?
Eso es un factor muy importante en la provincia de Buenos Aires. Ahí hay que ver cómo se dirime la interna que tienen hoy con el gobernador Kicillof, pero el peronismo es un factor que no hay que dejar de analizar en la principal provincia de la Argentina. Después hay elecciones en distritos y hay que ver qué pasa en algunas elecciones que son muy simbólicas, como la Ciudad de Buenos Aires, el interior, Córdoba o Santa Fe, que vienen siendo gestionadas por buenos gobernadores.
El desafío del Gobierno va a estar centrado en la provincia de Buenos Aires y la Ciudad de Buenos Aires. Creo que el Gobierno tiene una lógica, que es la lógica inherente al poder, que es tratar de consolidar la figura del Presidente y de que no haya sombra detrás de esa figura. Entonces, en esa lógica, algunos que son aliados pueden convertirse en enemigos. Yo veo una relación muy tensa y muy difícil entre el Gobierno y la Ciudad de Buenos Aires, y esto se traduce también en algunos eventos que ocurren en la Legislatura, como no apoyar en el Presupuesto.
No hay una respuesta consecuente de lo que hace el PRO en el marco nacional con lo que hace La Libertad Avanza en la Ciudad. Milei ha dejado traducir la decisión de jugar fuerte, de consolidarse como la única fuerza en términos competitivos y de ir por todo. Desplazar al que estaba antes está en la naturaleza de todo poder, y cuando hablo de la figura más importante me refiero a Mauricio Macri, un hombre que ha apoyado al Gobierno.
La provincia de Buenos Aires es el escenario de mayor pobreza y de mayor marginación, en donde las expectativas electorales del peronismo se mantienen, y pueden incluso hasta mejorar en términos de la crisis social. Esto es un dato y no se necesita ser encuestador en Argentina para analizar esto. Las fuerzas del centro están en un proceso de desarrollo, como lo que puede ser un centro nacional con la figura de Schiaretti. Eso cuesta más porque es mucho más fácil desde el punto de vista de la construcción política, y en eso también le interesa al gobierno la polarización.
La polarización se construye con dos y se desarrolla en el mundo de la comunicación y de las redes, que es el mundo que hoy decide. Hay que hacer un esfuerzo para existir en lo que puede ser un centro nacional, un centro productivo capitalista y un centro moderado donde la mesura en la palabra y el ejercicio de la Constitución sean un valor. Creo que hay un espacio para eso y hay que ver si se puede construir. Los otros dos planos tienen liderazgos más claros. En política es muy difícil construir una propuesta cuando no tenés un liderazgo definido.
Se puede decir que al centro le falta un candidato
Al centro le falta un liderazgo que emerja y sea respetado a nivel nacional. Hay gobernadores jóvenes, dirigentes interesantes, empresarios o personas del mundo del deporte. Milei se construyó en el último año.
Cuando algunos analistas tratan de entenderlo o descalificar a la oposición diciendo que no existe nadie, yo les digo que eso es cierto pero que alguien va a llenar esos espacios vacíos. Los procesos en el mundo moderno hoy son mucho más rápidos. Antes costaba 20 o 30 años construir un partido, un liderazgo, respeto y valoración en una actividad como la política, pero hoy es mucho más rápido porque la sociedad considera otros valores. Hay personas intentando consolidar ese espacio que el Presidente, pero le haría bien a la Argentina.
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Quizás el desprecio marca que ve que ahí está la posibilidad de que se lo supere…
Porque es más fácil descubrir con lo que ya fracasó y con los viejos estilos. Obviamente hay que reconocer cierta resistencia, actitud y lucha por el poder en esos dirigentes, aunque no quiero personalizarlos. Lo que me parece es que desde el peronismo o el kirchnerismo todavía no han logrado un debate más remozado en el plano de las ideas.
Eso los lleva a repetir viejas lógicas, como Kicillof, que el otro día dijo que compraría Aerolíneas Argentinas. Hay construcciones que son de contenido demagógico y quieren ser la contracara con el jueguito del Estado presente, con dirigentes que tuvieron que pasar al olvido porque la bancarización los desplazó. Si bien el Gobierno mantuvo un nivel de aumento en la Asignación Universal por Hijo, la eliminación de los intermediarios en el esquema de planes también es un acierto del Gobierno.
Alejandro Gomel: ¿Hay un paralelismo claro entre la relación de Jorge Macri con Javier Milei y la de Néstor Kirchner con Eduardo Duhalde? ¿Puede terminar igual?
Ese interrogante es interesante y la respuesta es que tiene que ver con la naturaleza del poder. El que conduce y el que gobierna trata de derrotar y desplazar el liderazgo anterior, especialmente en el centro-derecha o centro-derecha liberal, que emerge con la figura de Mauricio Macri, para parecer la única figura gravitante.
Así como LLA avanza sobre el electorado del PRO, seguramente en la toma de la Ciudad de Buenos Aires pueda estar en el escenario de combate electoral del próximo año. No lo descarto. Los gestos y los hechos y la naturaleza del poder pueden devenir indudablemente en ese camino, en donde LLA va a ir con candidatos propios en la Ciudad, y el PRO tiene que prepararse para esa discusión porque es su ciudad y la que viene gobernando. Me parece que ahí va a estar el punto nodal.
Siempre analizo también los hechos históricos, pero el poder no permite la coexistencia de una figura gravitante siempre como una sombra. En ese sentido, puede haber una decisión de ir por todo, y creo que lo enuncian.
AG: El que está en problemas ahí es la figura de Mauricio Macri y dónde puede quedar parado…
En lugar de haber consolidado un marco de alianza mucho más amplio, hay algo dentro de la visión de La Libertad Avanza de ser lo nuevo, de ser lo que ha emergido como producto de la voluntad política, del rechazo a los conceptos sustanciales de la política, como “la casta” y a todos los factores que son de la dinámica del poder Legislativo o los periodistas, que son los que configuran lo viejo. Hay que ver qué tan fuertes se sienten en términos electorales. Hoy están viviendo un momento de mucha euforia, pero ocho meses en Argentina es un montón de tiempo.
Elizabeth Peger: El Senado está a punto de iniciar la sesión para analizar la situación del senador Kueider. ¿Qué análisis hace usted de esto? ¿Qué decisión debería tomar el Senado?
Yo veo un escenario bastante complejo, donde Kueider puede terminar siendo expulsado de la Cámara de Senadores el día de hoy. Si el hecho fuera controvertido o si hubiera dudas, lógicamente habría que abrir la Comisión de Constitucionales, hacer un proceso interno, y tener derecho al descargo de la defensa. Lo que pasa es que acá en Argentina nadie lee la Constitución ni tampoco analiza los hechos.
Kueider fue detenido in fraganti delito. Esto quiere decir que lo detuvieron y acreditaron en el momento porque estaba cometiendo un ilícito que fue calificado por la justicia paraguaya y hay un proceso abierto en Paraguay. Si un senador es atrapado in fraganti, no hace falta una condena firme para expulsarlo.
Cuidado con la sesión de hoy, a ver cómo se conjugan los distintos sectores de la política en el Senado, porque puede devenir en un resultado en donde Kueider no solamente sea suspendido, sino expulsado.
EP: ¿Y cuál sería su opinión en este caso?
Hay dos planos. Una cosa es que un senador o un diputado tenga una cuestión discutible en el plano moral, que hay que probar y acreditar, y que hay que analizar también el derecho al descargo, y otra cosa es que un senador o un diputado cometa un delito de manera in fraganti. Eso cambia la perspectiva, y no sé qué es lo que pueda ocurrir. Hay que ver cómo se desarrollan hoy las fuerzas dentro del Senado y cómo juega el radicalismo. No puedo anticipar.
EP: Le preguntaba porque fue senador mucho tiempo. ¿Qué posición plantearía usted?
Frente al hecho, me parece que puede ocurrir la expulsión. Me parece que el planteo de la suspensión es un planteo que deja en stand by la situación y lo deja supeditado al desarrollo de los hechos que están en el plano de la investigación, en el marco de la justicia de Paraguay.
Claudio Mardones: El bloque Unión por la Patria ha pedido la expulsión.
Hay que ver qué pasa. No me gusta hacer de adivinador de lo que va a ocurrir. Todo indicaría que la sesión arranca para un destino de suspensión. También puede derivarse en el otro evento, que es más gravoso para el Gobierno, porque Kueider venía orbitando en el escenario de La Libertad Avanza. También puede convertirse en un simulacro, donde los sectores en pugna terminen neutralizándose.
CM: Sobrevuela la idea de que podrían convocarse sesiones extraordinarias para febrero, y hay una la expectativa de avanzar con la eliminación de las PASO, en un contexto en donde Cristina Fernández de Kirchner dijo la semana pasada que «los argentinos no pueden votar cada dos años». ¿Cree que puede suceder un escenario de este tipo?
Lo veo como lo vi siempre. El gran debate pendiente en la Cámara de Diputados, que es la Cámara que regula los recursos y gastos del Estado, es el debate del Presupuesto. El Gobierno ha eludido dar este debate, sumando mayor nivel de decisionismo y concentración de poder en este debate. Yo creo que las dos herramientas del Gobierno para el año electoral son la concentración de la toma de decisiones, en el plano de que no va a haber ley de Presupuesto, y luego mantener el control claro y aguantar las dificultades que tiene la industria y el sector exportador.
El otro día, uno de los economistas que más respeta al Presidente, que siempre tuvo palabras de aliento y que le ponía 10, sostuvo que el plan se parece un poco a un viejo plan anterior y que el tipo de cambio impacta muy duro a la industria y al comercio. Estos temas empiezan a aparecer y son los temas que el Gobierno va a tener que abordar y sostener.
Hay una gran capacidad del Gobierno de instalar temas secundarios, y ustedes también, perdónenme, repiten temas que del plano secundario. Ustedes hablan de la reforma electoral y de un montón de temas que son secundarios. De lo que deberíamos estar hablando todos es que, por segundo año consecutivo, se mantiene una fuerte discreción y manejo de gastos y recursos del Estado, y no hay ley de presupuesto. Y no hay nada más importante que eso, y juguemos en el bosque mientras el león no está. Con esto quiero decir que los medios de comunicación ayudan a instalar temas que no son trascendentes y que deberían haber sido tratados en conjunto. Cuando el Gobierno votó la Boleta Única, podría haber planteado la eliminación de las primarias.
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CM: Fue el Gobierno el que insistió con ese tema de negociar y abrir la negociación del Presupuesto a cambio de eliminar las PASO. El Gobierno preparó una conferencia de prensa que quedó suspendida a partir del desacuerdo con el PRO, y eso fue 15 o 20 días antes de que José Luis considerara que la negociación estaba fracasada.
El PRO fue un partido que acompañó a pleno al Gobierno, con todas sus potencialidades y con discurso dentro del recinto. También fue parte del bloqueo de temas muy sensibles, como en el debate de los jubilados y de las universidades.
De todas maneras, el periodismo tampoco destaca y analiza el juego de valores Discuten sobre temas secundarios cuando el gran planteo sería: ¿Por qué la Argentina no tiene ley de Presupuesto? ¿Por qué los derechos de los gobernadores no se pueden plasmar en el marco de la ley presupuestaria? El Presidente fue a presentar el presupuesto un día domingo a la noche, y yo estuve ahí por respeto a la figura presidencial que estuve. De repente, se corta el diálogo en el debate en la Cámara de Diputados. Ese es el tema central.
Esta maratón de elecciones es un problema patológico de la Argentina y de las provincias, en donde en un año electoral hay elecciones seis o siete veces. Este es el problema. Los gobernadores y los intendentes ponen las elecciones en fechas distintas. Hemos perdido la visión del Estado Nación y del interés colectivo. Hemos fragmentado el sistema democrático. Cuando restauramos democracia con Alfonsín, se votó el mismo día todos los cargos. Es cierto que veníamos de una dictadura, pero las deformaciones de las constituciones provinciales y de las cartas orgánicas municipales gravitan en el plano de la fragmentación de la Argentina y de la prevalencia de los intereses locales por encima de los intereses nacionales. Este me parece que es uno de los problemas que habría que abordar en un proceso de reforma electoral. Este tema hay que tratarlo integralmente y forma parte de una profunda reforma.
Si vos me preguntás, estoy de acuerdo en reducir el gasto público en materia política electoral y avanzar hacia un sistema parecido al americano, con libre aporte y sin límite. Toda esta moralina estúpida que te determina hasta cuánto es el aporte está mal. El que recauda más, recauda, lo tiene que denunciar ante la AFIP. Me parece que eso podría ser una regla de mayor transparencia y le sacaría al Estado la carga fiscal. En eso estoy más de acuerdo con el gobierno de Milei.
El único partido que utilizó la primaria fue Juntos por el Cambio. El resto tuvo listas únicas. Esta es la verdad. El peronismo hizo una primaria ficticia entre Grabois y Massa, y todos sabíamos cuál era el resultado de eso. Creo que es un debate más complejo, que hay que hacerlo fuera del año electoral, se trata de ver cómo se puede simplificar la vida de los argentinos cuando tienen que decidir a quién elegir a sus gobernantes, porque eso también provoca agotamiento y agobio respecto de la decisión política y del proceso electoral que vive la Argentina.
Se me ocurre también que las primarias serían una herramienta fundamental para Encuentro Republicano.
Por supuesto, y yo creo que no se pueden cambiar las reglas de juego en un año electoral. Si el gobierno quería este debate, lo tendría que haber hecho este año. El año que viene ya entramos en un año electoral y se tienen que respetar las reglas.
Pareciera ser que aquella historia de dos grandes partidos políticos, el peronismo y el radicalismo, que tenían la suficiente estructura para organizar una interna, hoy pasó de moda. El propio bloque que vos representás en Diputados lo conforman 10 partidos diferentes…
Sí, con visiones bastante heterogéneas.
Entonces las PASO serían fundamentales para esta nueva realidad política. Néstor Kirchner tenía razón en que las PASO eran una forma de ordenar la política.
Estoy de acuerdo. Si fuera un hombre integrante de la Libertad Avanza y hubiera estado cerca del Presidente, jamás le hubiera aconsejado tocar el sistema electoral, ni la boleta, porque Milei gana con este sistema. Gana con la primaria, gana con el financiamiento estatal, con el conocimiento público que le da financiamiento estatal y gana con la participación en medios privados de comunicación.
Ahora modificó todo lo que le sirvió para ganar y llegar al poder haciendo la Boleta Única? Sinceramente, eso en mi manual no está. Trato de repasarlo porque la Boleta Única es producto de posiciones más minoritarias. Sí tenés el poder, hablando cínicamente, ganaste las elecciones, tenés el aparato del Estado, tenés recursos, unificás listas, vas a poder controlar el comicio y vas a tener fiscales en todas las mesas, ¿ponés Boleta Única? Es interesante.
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