La peronóspora, que hizo estragos, no afectó tanto las variedades paseras.
La producción de pasas de uva logró este año tener un rinde hasta 5% mayor que en 2024. Con este resultado, se despega del sector del vino, que cerró las estadísticas un 11% por debajo de la temporada pasada. Este resultado logró que esta rama mantenga su camino de crecimiento de la última década. Si bien esperaban una demanda excepcional, por el momento se encuentran dentro de los parámetros normales, aseguró Francisco Vizcaíno, productor pasero e integrante de la Cámara de Comercio Exterior. A pesar de esto, creen que toda la producción podrá venderse con normalidad.
La vendimia 2025 fue para algunos productores una temporada para el olvido. Además de varias tormentas de granizo, un rebrote histórico de peronóspora, un hongo que afecta la vida, se cobró parte de la producción. A esto se sumó que otra vez los viñateros criticaron un bajo precio de la uva y que los mercados del vino continúan su tendencia en caída. A la vez, el sector de uva en fresco también enfrentó una fuerte baja en sus ventas, que continua en tendencia en baja de hace años. En medio de todo esto, para el sector que destina la fruta a pasas, fue un año equilibrado, con un crecimiento que recién podrán medir en concreto a fin de año.
Vizcaíno explicó que esta falta de datos más certeros se debe a que los establecimientos todavía no terminan de calcular cuánta uva se destinó a pasas. “El número fino está para fin de año, cuando cierran los datos de exportación”, explicó. El mercado interno, que poco representativo, tampoco tiene datos propios, por lo que es el balance de las ventas al exterior el que termina definiendo cómo le fue a la temporada. Por eso, también deben tener ya toda la pasa entregada, pero los industriales se encuentran todavía trabajando en la selección y despacho, algo que toma varios meses.
El cálculo actual se desprende de lo que han ido informando los productores finqueros. Este año la expectativa del INV era que hubiera más producción de uva para todos los destinos. Finalmente, en San Juan esta expectativa, en lo que se destina para la vinificación, no se cumplió.
El principal problema fue el hongo, que tuvo un primer brote en primavera, comiendo la parte fresca de las plantas e impidiendo el crecimiento de uva. Vizcaíno contó que los productores de pasas no lo sufrieron porque las variedades que se destinan a este fin no son tan sensibles a la infección. También ayudó que los productores hicieron las curaciones para prevenir los contagios y que la mayoría de los paseros no están en las zonas que fueron más afectadas. En cambio sí tuvieron daños por granizo u otros fenómenos aislados, pero alcanzaron a impactar en los valores totales de la cosecha.
Así, la temporada tuvo buenos resultados, aunque la gran expectativa que tenían a principios de año, de un récord de exportaciones, no parece estar cerca de cumplirse. “Notamos que hubo una gran velocidad de mercados que buscaban asegurar ventas, esto generó la ilusión en el sector de que iba a haber más ventas, pero por ahora todo viene como la media histórica”, contó. Si bien todavía falta para que se terminen de definir los números, el productor explicó que no están preocupados porque quede un sobre stock. “Argentina representa un porcentaje chico dentro de la producción de pasas y en general puede colocar todo el producto sin problemas, por lo que creemos que esto va a repetirse este año”, dijo.
> Productores
En la provincia hay 30 plantas procesadoras de pasas de uva y claculan que entre 350 y 400 productores destinan sus uvas al secado todos los años. El número va cambiando, porque quienes tienen variedades multifunción eligen cada año a qué destinar la fruta.
> Nueva Mesa de Pasas
El Gobierno de San Juan se reunió con representantes del sector pasero y creó la Mesa de Pasas (ver foto), que quedó vinculada al Programa de Desarrollo Vitivinícola y en la que participan varias cámaras del sector, incluidos viñateros. Durante el encuentro, que fue en las oficinas del Ministerio de Producción, discutieron temas vinculados a la sanidad vegetal, los costos de producción, la situación de riego y otros temas vinculados a la coyuntura. También trabajaron sobre la exportación de pasas a California y la incorporación de nuevas variedades que fueron desarrolladas por los técnicos del INTA. Entre los objetivos que dejaron planteados fue la de trabajar en un certificado de identificación geográfica de las uvas sanjuaninas, un proyecto en el que trabajan desde la Secretaría de Agricultura.
/DC